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Terapia de respiración funcional

La práctica regular del trabajo de respiración tiene el poder de mejorar la bioquímica sanguínea y la biomecánica de la respiración para:

• Mejorar la circulación
• Aumentar la oxigenación de las células, los músculos y el cerebro.
• Ayudar a la función equilibrada del sistema nervioso.
• Aliviar el estrés, la ansiedad, la depresión, los ataques de pánico, el agotamiento y la fatiga.
• Reducir el asma y otras enfermedades pulmonares.
• Mejorar la concentración y el enfoque.
• Aumentar el rendimiento atlético y la resistencia.

Movimiento somático

En términos generales, un movimiento somático es aquel que se realiza conscientemente con la intención de centrarse en la experiencia interna del movimiento en lugar de en la apariencia externa o el resultado del movimiento.

Centrarse en la experiencia y el proceso en lugar del resultado final puede ser un concepto difícil de comprender para muchas personas. Se trata de cómo nuestro sistema nervioso aprende cosas nuevas. Si practicamos un movimiento como si fuera la primera vez que lo hacemos, notaremos algo nuevo y aprenderemos algo nuevo cada vez, y el proceso de aprendizaje será más eficiente y efectivo. Al principio es útil moverse lentamente, pero con la práctica podemos realizar movimientos más rápidamente sin dejar de ser conscientes de lo que estamos haciendo. Se trata de la calidad del movimiento.

Podemos aplicar la esencia del movimiento somático tanto a la danza como a la práctica de qigong y yoga.

Yoga Yin

Fundado por el experto en artes marciales Paulie Zink a finales de la década de 1970, el Yin Yoga es una práctica de yoga occidental moderna que tiene sus raíces en el sistema de yoga taoísta. Desde su fundación, Yin Yoga se ha desarrollado aún más y es ampliamente enseñado por dos maestros principales, Paul Grilley y Sarah Powers.

No es de extrañar que por su origen el Yin Yoga esté muy ligado a la comprensión china de cultivar la energía y activar su flujo en los canales o meridianos energéticos. Como en Tao Yin, las posturas se realizan sentado o acostado. Mientras que los ejercicios de Tao Yin todavía invitan a movimientos suaves de acuerdo con el ritmo de la respiración, en Yin Yoga se nos anima a adoptar una postura, quedarnos quietos y permanecer en esa postura durante un período prolongado de tiempo (3-5 minutos).

Experimenté el poder del Yin Yoga durante una de mis primeras clases de Yin Yoga, mientras estaba sentado en una posición inclinada hacia adelante y concentraba mi conciencia en mi cuerpo y mi respiración. De repente, después de tres minutos en la postura, fue como si algo en mi espalda baja se alargara, y por sí solo, sin que yo hiciera nada, mi cuerpo se movió más profundamente hacia adelante, respondiendo al tiempo y la gravedad.

Mientras que una práctica de Yoga muy activa estimula el flujo sanguíneo y energético en la musculatura y capas superficiales del cuerpo, una práctica de Yin Yoga es más pasiva y contemplativa, permitiendo que la energía circule en las capas más profundas del cuerpo, como los tendones, los ligamentos y la fascia. Esto no sólo mejora la flexibilidad de nuestras articulaciones, sino que también ayuda a regular y aumentar la circulación de energía en los meridianos.

Dentro de cualquier sistema de yoga tradicional, el propósito de las asanas o posturas físicas es preparar el cuerpo para períodos prolongados de estar sentado tranquilamente durante la meditación. Debido a que el Yin Yoga es capaz de estimular la circulación a un nivel tan profundo, es una práctica extremadamente beneficiosa para cualquier persona a la que le guste meditar.

La práctica de Yin Yoga cultiva la conciencia del silencio interior, lo que mejora la relajación, la claridad y la estabilidad mental y emocional. Para afectar los tejidos conectivos profundos del cuerpo, se nos pide que disminuyamos la velocidad y mantenemos la postura (del suelo) durante un período más largo de lo que normalmente haríamos. Durante ese tiempo, se nos da la oportunidad de trabajar suavemente con nuestra respiración y de notar y atender a lo que sucede en nuestro cuerpo, sentimientos, emociones y mente de una manera no agresiva.

Yin Yoga es una práctica apta tanto para principiantes como para estudiantes experimentados. Explorar el sistema de meridianos en relación con los ejercicios y sus elementos correspondientes es parte de la práctica.

Clases y consultas individuales centradas en tus necesidades

Esta es una oportunidad única para decir «sí» a lo que te nutre. Sesiones que Te permitirán calmar Tu sistema nervioso y explorar el aprendizaje experiencial. Tú eliges la hora, el día, la ubicación y el contenido; solicita una consulta hoy para programar tu intención e intereses.

Ya sea que trabajemos en el estudio, en tu casa o en el trabajo (o para una experiencia estimulante, ¡al aire libre!), dedicamos tiempo al autocuidado y la investigación. Llámalo volver a casa contigo mismo. Para volverse más consciente de la sabiduría interior. Reconectarnos con nuestras intenciones. Las sesiones combinan yoga y respiración, respaldado por la anatomía experiencial y el movimiento somático inspirado en la conexión cuerpo-mente.